Electa el 9 de mayo en el nuevo Consejo de Derechos Humanos de la ONU, Suiza ha demostrado su capacidad para desempe?ar un nuevo rol en medio de la escena internacional. Este ingreso es un ?xito para la pol?tica extranjera suiza y la consejera federal, Micheline Calmy Rey, lo reivindica como tal. « Suiza forma parte de las Naciones Unidas desde hace tres a?os. Lograr la creaci?n de un Consejo de los Derechos Humanos y obtener una sede con casi tantos votos —como fue el caso de tres grandes naciones europeas—, es el signo de que hemos adquirido una credibilidad en el plan internacional », sostiene la ginebrina. Basado en la ciudad de Calvino, el Consejo depende directamente de la Asamblea General de la ONU y sesionar? por vez primera el pr?ximo 9 de junio.
PREGUNTA (P).- ?La silla obtenida por Suiza es la recompensa de los esfuerzos hechos en vistas a la creaci?n de este nuevo Consejo?
RESPUESTA (R).- Ese es uno de los elementos, si. Suiza se comprometi? mucho para que este Consejo pudiera ser puesto en marcha. La ex-Comisi?n de Derechos Humanos se hab?a desacreditado ampliamente y quisimos efectuar una reforma tendiente a darle una consideraci?n internacional en esta materia, porque los derechos humanos son el punto central de la pol?tica extranjera helv?tica. Los Estados cada vez estan mas convencidos que su respeto es el corolario indispensable de una pol?tica del desarrollo eficaz y son tambi?n una condici?n de estabilidad social, y de paz.
P.- ?En qu? el nuevo Consejo es mas cre?ble que la precedente comisi?n, teniendo en cuenta la presencia de pa?ses como China o Arabia Saudita –que no son verdaderos campeones de los derechos humanos?
R.- Observe el procedimiento de voto. Todos los pa?ses electos han tomado posiciones cuya puesta en marcha ser? evaluada por un mecanismo de examen peri?dico. Por cierto, el Consejo sesionar? de manera casi permanente, si bien que podr? reaccionar inmediatemente en caso de grave violaci?n. Deseamos una ruptura con el modo de funcionamiento de la antigua Comisi?n, pero es necesario tambi?n darse cuenta que es indispensable mantener el di?logo con los pa?ses que no tienen la misma concepci?n de los derechos humanos que nosotros. No es con las lecciones dadas por un grupo de Estados « perfectos » que se obtendr?n resultados.
P.- ?La ausencia de los Estados Unidos no constituye una desventaja? R.- Nosotros quisimos que ellos participaran de manera constructiva a la puesta en marcha del Consejo. Ellos no han exclu?do implicarse posteriormente. Y nos alegramos por esta actitud.
P.- Adem?s del mejor funcionamiento, ?cu?les son los otros objetivos perseguidos por Suiza en el seno del Consejo?
R.- Simplemente hacer progresos en materia de derechos humanos. Vamos a seguir integr?ndolos, sistem?ticamente, en los objetivos de nuestra pol?tica extranjera, y de nuestra pol?tica del desarrollo. La experiencia del terreno muestra que no puede haber paz, estabilidad y desarrollo; sin el respeto de los derechos humanos.
P.- ?Es esta prioridad acordada al respeto de los derechos humanos que explica vuestra prudencia con respecto a las nuevas leyes sobre el asilo y los extranjeros, que se votar?n en Suiza en septiembre?
R.- Suiza es conocida en el mundo como un pa?s que respeta el derecho de sus ciudadanos y que les atribuye amplias prerrogativas. Eso hace nuestra credibilidad y nuestra imagen sobre la escena internacional. Es verdad que me hago algunas preguntas cuando observo el camino que estamos tomando, por ejemplo, con las nuevas leyes sobre el asilo y los extranjeros.
P.- ?Usted piensa que eso va a afectar la credibilidad de Suiza?
R.- Espero que no, pero me preocupa.
P.- Usted insiste en hablar de « derechos humanos », antes que de « derechos del hombre ». ?No teme que esta perorata feminista pueda da?ar el objetivo que persigue?
R.- Primeramente, no es una perorata feminista. Los derechos del hombre que nacieron durante la Revoluci?n francesa eran verdaderamente los derechos de los se?ores. No inclu?an a las mujeres. Luego, nosotros tenemos una tradici?n un poco diferente, en Suiza. Jean Jacques Rousseau hablaba de derechos de la humanidad. Y nosotros tambi?n tenemos referencias universales. Se habla, por ejemplo, de « Menschenrech » o de « Human rigths ». El veh?culo de la lengua no es inocente y necesitamos una terminolog?a adecuada. Desde mi punto de vista, es importante reconocer que los derechos de la mujer o, incluso, de los ni?os; formen parte de los derechos humanos. No se puede reducirles a lo que eran en su origen, a saber, los derechos de los se?ores.
P.- Hablemos de mujeres. ?Usted va a tener una nueva colega en el Consejo Federal (Poder Ejecutivo) de Suiza?
R.- Me alegro. Es importante que haya mas de una mujer en el Consejo Federal. Por nuestra experiencia de familia, las mujeres tenemos una manera diferente de hacer la pol?tica y estoy segura que haremos un buen equipo. La presencia de Doris Leuthard modificar? la din?mica de grupo del Consejo Federal. Le deseo a ella buena suerte en el camino que le toca recorrer entre hoy y el 14 de junio, d?a de su elecci?n.
FIN